Un banco de piedra pulido es una excelente adición a cualquier jardín, ya que agrega un toque de elegancia y naturalidad a este espacio. Este tipo de banco puede utilizarse como un lugar de descanso para disfrutar del jardín, para meditar, leer un libro o simplemente relajarse.
Este banco de piedra fue solicitado por una clienta que nos mostró una imagen vía email de la forma que le gustaría tener. A raíz de ahí, le presentamos una propuesta con medidas concretas.
Para la elaboración de este banco de piedra, fue importante seleccionar una piedra de alta calidad que permitiese un buen acabado pulido y fuese resistente a las inclemencias del tiempo.
Se seleccionó para ello la piedra de Ulldecona (crema cenia), por sus fantásticas características intrínsecas.
Las medidas fueron de 190 x 29 x 6 cm para el tablero superior. Los dos apoyos tenían 41 cm de altura y 26 cm de fondo, con la cara anterior con formas curvas. La altura del conjunto era de 46 cm.
Es importante señalar que el tablero tenía unos rebajes en la cara inferior donde se encastraron las patas. Con esto se conseguía dotar al conjunto de mayor rigidez.
Una vez elaborado, se empaquetó con delicadeza y viajó desde el Taller de Torregris a Andalucía (concretamente a la provincia de Cádiz).
Una vez en su destino se debía seleccionar un área plana y nivelada en el jardín donde se iba a colocar. A continuación, se debían cavar agujeros en el suelo donde se vertía un poco de hormigón para apoyar las patas del banco.
Con este relato nos gustaría resumir con la afirmación de que un banco de piedra pulido es una excelente opción para añadir un elemento natural y elegante a cualquier jardín. Con un poco de creatividad y trabajo, se puede crear un banco único y hermoso que será un punto focal en el espacio al aire libre.