MONOLITO DE PIEDRA
En ocasiones se llevan a cabo trabajos cargados de simbolismo. En este caso, nos fue encargado en un momento duro, en que los encargos no sobraban y la economía de país se encontraba en una situación complicada.
Hago referencia al simbolismo, porque en aquellas fechas del año 2016 se quiso homenajear y honrar la memoria de un buen hombre a través de un pequeño monolito de piedra (aunque en realidad eran varias las piedras que lo conformaban).
La ubicación de este trabajo era un área recreativa del Término Municipal de Navarrés, cuya superficie había sido donada al Ayuntamiento por la familia de este hombre.
Fruto de esta donación se habilitó la zona para disfrute de excursionistas en un entorno de gran valor medioambiental.
Para llevar a cabo el trabajo optamos por utilizar la piedra del terreno, más acorde con el entorno seleccionado.
El tamaño completo no era muy grande, con una altura total de 140 cm, y estaba formado por una base cúbica de 45 x 40 cm de superficie y una parte superior de forma piramidal de 4 caras.
La base estaba compuesta por pequeños sillares en tres alturas y cuatro sillares por fila. Estos apoyaban en una única pieza que ocupaba toda la superficie inferior.
Esta pieza inferior estaba totalmente apiconada en sus cuatro caras vistas. Los sillares de la base estaban apiconados en la superficie y con las aristas redondeadas y regularizadas con la gradina.
La parte superior estaba formada por tres piezas con tres caras verticales y una inclinada. La pieza superior acababa en punta (pirámide de cuatro lados triangulares).
En la cara inclinada de la pieza central se he hizo un rebaje para albergar una placa de piedra crema cenia con la inscripción de letra pintada en negro.
El resto de caras estaban abujardadas, dejando una cinta de dos centímetros de anchura en la zona de las aristas.
Como las piezas no eran excesivamente pesadas, en una mañana monté yo solo el monolito de piedra en su lugar definitivo.